Más de una vez nos hemos ido a la cama deaeando tener un sueño agradable. A veces eso sucede y nos levantamos casi tristes de volver a la realidad, pero con una sensación de actitud positiva ante el día que nos espera. A todos nos gustaría poder tener siempre sueños buenos y agradables y dejar en el pasado las pesadillas.
Quizás ahora eso sea posible en cierto sentido. Hace poco unos científicos han descubierto que podemos ejercitar nuestro cerebro (ese gran desconocido) para que nos provoque sueños útiles y positivos cada vez que nos vamos a dormir. De esa manera, no solamente nos levantaremos de mejor humor, también más descansados.
Ursula Voss es una doctora alemana que ha estado investigando este campo. Mendiante unas suaves corrientes (indoloras) consigue redirigir el sentido de los sueños. Con su terapia busca ayudar especialmente a todas esas personas con graves traumas en su pasado, que no los pueden superar porque se repiten a diario en sus horas de descanso.
En estos casos el paciente con trauma, lo que logra no es suprimir esos sueños desagradables, sino saber que son un sueño y verse capaz dentro de este de dominar esa situación sabiendo que no es real. Eso ayuda a su mejora en todos los niveles.
Esta terapia solamente se puede usar en cerebros sanos, no es peligrosa, pero la misma creadora de estos “sueños lúcidos”, como la doctora Voss los llama, advierte que en cerebros con problemas degenerativos no es una técnica recomendada. Las posibilidades de este estudio son infinitas, desde ayudar a personas que han sufrido grandes pérdidas familiares a soldados que vuelven marcados de una guerra.